¿Qué es un centro de transformación?
Un centro de transformación es una instalación eléctrica que forma parte de centrales eléctricas, dónde se genera la energía, y de líneas de transporte y puntos de consumo, en donde convierte la energía eléctrica en diferentes tensiones, y conecta a otras líneas y redes en cualquier punto.
Los centros de transformación están compuestos por uno o varios transformadores de alta o baja tensión eléctrica, así como de otros elementos y obra, según sea el caso.
En los centros de transformación se reducen las tensiones de energía eléctrica que transporta la red, desde los valores de media tensión, entre 11 y 45 KW, a los valores de baja tensión para el consumo, entre 400 y 230 V, y 230 y 127V.
Instalaciones en centros de transformación
Conductores eléctricos
Los conductores pueden usarse desnudos o recubiertos de materiales aislantes apropiados. Pueden estar compuestos por cualquier material metálico que tenga las características adecuadas para realizar sus funciones, y que también tenga resistencia a la corrosión.
Conexiones en centros de transformación
Todas las conexiones de conductores entre sí y a otros elementos tienen que realizarse con dispositivos adecuados para no aumentar la resistencia eléctrica de los mismos.
Paso de canalizaciones y líneas eléctricas
Los pasos a través de paredes, tabiques o muros de líneas eléctricas aéreas al interior de los edificios se tienen que hacer con conductores con recubrimientos aislantes, de forma que se pueda evitar la entrada de agua. Mientras, las conexiones de AT se tienen que hacer por medio de orificios de las dimensiones adecuadas, manteniendo la distancia con masas y con aisladores pasantes.
Canalizaciones en centros de transformación
Los conductores situados en el interior de una instalación están divididos en canalizaciones de BT y AT, para lo que se debe adaptar cada parte de la instalación según el reglamento correspondiente:
- No se puede instalar canalizaciones ni por encima, ni por debajo de lugares en los que haya materiales combustibles que no se auto-extingan
- Todos los conductores de medida, mando, etc., tienen que mantenerse separados de los conductores con potencia superior a 1 kV. Para esto, se pueden instalar dentro de canalizaciones o tubos metálicos puestos a tierra, o protegerlos con tabiques de separación.
- Las galerías subterráneas, zanjas y tuberías que alojen conductores deben ser amplias y estar ligeramente inclinadas hacia los pozos de recogida de aguas, o al menos estar provistas de tubos de drenaje.
- El diámetro mínimo de los conductores de cobre en canalizaciones con conductores desnudos debe ser de 0,8 centímetros.
- Las canalizaciones por medio de conductores desnudos sobre aisladores de apoyo, deben tener en cuenta:
- La tensión nominal entre conductores, y entre éstos y tierra.
- El nivel de aislamiento previsto.
- La contaminación ambiental.
- Las posibles intensidades.
- El diseño mecánico de la instalación bajo los efectos de los esfuerzos dinámicos derivados del cortocircuito.
- El campo magnético resultante en caso de que pueda afectar a otros elementos a su alrededor.
- El diseño de las canalizaciones con conductores aislados tiene que ajustarse al Reglamento de AT.
- Se puede reducir la profundidad y separación de circuitos para adecuarla a la entrada de instalaciones en canalizaciones de acometida, siempre que sea bajo los lineamientos de su correspondiente Reglamento.
- Los conductores deberán estar protegidos en todo el tramo de acometida y no se podrán curvar más de lo que indique el fabricante.
Instalación eléctrica de cables aislados
Se puede instalar directamente sobre un lecho de arena en zanja, en tubos enterrados, o en canales revisables con vía de evacuación de agua siempre que estos estén a la intemperie.
Otra forma de instalar estos cables aislados es sobre soportes, palomillas o directamente sujetos a una pared, o colgados de fiadores que se encuentren a una altura que permita la libre circulación de personas o vehículos.
Los conductores rígidos recubiertos de material aislante, como barras o, pletinas, permiten reducir las distancias entre fases y a tierra. Estos, a efectos de seguridad, se deben tratar como conductores desnudos, a excepción que formen parte de montajes eléctricos prefabricados.
Mantenimiento de los centros de transformación
Las instalaciones eléctricas en locales de mucho tráfico de personas pueden llegar a ocasionar accidentes, o incluso a provocar incendios, poniendo en riesgo la seguridad de las personas.
Es por ello que los centros de necesitan someterse a mantenimientos periódicos para la conservación de sus funciones óptimas, así como también para potenciar su vida útil.
Además, también deben hacerlo para cumplir con el marco legal actual que obliga a establecer contratos de mantenimiento con personas físicas o jurídicas especialistas en la materia. Esto porque este tipo de trabajos de mantenimiento no se pueden dejar en manos de cualquiera, sino que lo más recomendable es que alguien con los conocimientos certificados para ello sea quien se encargue de la revisión, mantenimiento y reparación de estos centros.
Esto según lo estipulado en el Real Decreto 337/2014 y Real Decreto 223/2008 que “obliga a los titulares a suscribir un contrato de conservación y mantenimiento con empresas inscritas en el Registro de Mantenedores de Alta Tensión.”
Así también “los centros de transformación quedan obligados a contratar los servicios de una empresa inscrita y certificada ya que cada 3 años es obligatoria una inspección reglamentaria por parte de un Organismo de Control de la Administración que presenciará las operaciones de mantenimiento levantando acta del estado de la instalación.”
Esto porque un centro de transformación necesita someterse a labores de mantenimiento para mejorar su eficiencia y garantizar que cumple con los criterios de seguridad que este tipo de instalaciones eléctricas debe tener.
Además, Pasero, expertos en servicios de mantenimiento e instalación para centros eléctricos, resalta que estas empresas también podrán encargarse de una cierta cantidad de tareas que son imprescindibles para el correcto mantenimiento de los centros de transformación, como por ejemplo:
- Control del nivel energético para identificar caídas en la energía eléctrica de la empresa.
- Limpieza mensual de todas las instalaciones, aisladores y soportes de la instalación.
- Revisión del correcto funcionamiento de conexiones de embarrados y cableados.
- Observación de los niveles de aceite.
- Reparaciones para la prevención de futuros fallos en el funcionamiento de las instalaciones.