Las necesidades de la gente van cambiando a lo largo de la historia. Es evidente que nada tiene que ver lo que la gente demanda a día de hoy a lo que se demandaba hace medio siglo. Pero es que tampoco tiene nada que ver lo que hacía falta hace apenas diez o quince años a lo que la gente necesita ahora. El proceso de globalización del que todos y todas formamos parte lo ha cambiado absolutamente todo en un periodo de tiempo muy reducido.
En la actualidad, la imagen lo copa absolutamente todo. Por algo la sociedad de ahora es conocida como la sociedad de la imagen. Ese factor es ahora más importante que nunca y en prácticamente todos los ámbitos de la vida. La gente lo sabe y ha tratado por todos los medios de adaptarse a ello. Eso es lo que explica el crecimiento que ha venido experimentando una labor como la de la cirugía estética, un sector que se ha visto muy beneficiada por la llegada de este mundo globalizado.
Los datos son los mejores aliados para describir una situación como es de la que venimos hablando. Empecemos por los datos que existían de operaciones de cirugía estética en el año 2009, los cuales fueron recolectados por un artículo del diario El País el año siguiente. En total, fueron 105.000 operaciones de este estilo las que se realizaron en el interior de nuestras fronteras. Una cifra que, según se informaba en la misma noticia, había caído como consecuencia de la crisis económica.
Es cierto que había caído ese número de operaciones. Según informaba otra noticia, en este caso publicada en la página web de El Periodico, en 2007 habían sido 400.000 las operaciones de este tipo que se habían producido en España. Después de unos años en los que este tipo de operaciones había sido considerado como algo que no era de primera necesidad, las cosas han cambiado. En la actualidad, cada vez más personas son las que están sometiéndose o valorando someterse a este tipo de intervenciones.
La imagen es hoy lo que más define a una empresa y a una persona. Este es el argumento que utilizan las segundas para entrar en un quirófano y someterse a una operación de cirugía estética, según nos han informado los profesionales de Artestética. La verdad es que esta es una situación que es bastante habitual en los tiempos que corren y que es una consecuencia del tipo de sociedad en la que vivimos a día de hoy. Y cada día se engrandece más.
El miedo ya no tiene razón de ser
Que el número de operaciones de cirugía estética haya crecido de nuevo en los últimos años ha generado una oleada de críticas a través de una de las herramientas que nos está dejando el mundo globalizado, las redes sociales. Sin embargo, la realidad dista mucho de lo que se dice en este tipo de espacios puesto que, en la actualidad, la cirugía estética es de las ramas más seguras y fiables de la medicina o la cirugía. Y es que el miedo ya no tiene razón de ser en un aspecto como este. Todas aquellas personas que han pasado por ella son las primeras que lo saben de primera mano.
Lo más importante de todo, a pesar de las críticas, es que todos y todas nos sintamos cómodos y cómodas con nuestro cuerpo, algo de lo que no hemos podido presumir nunca o casi nunca. La verdad es que no hay nada mejor que sentirse a gusto con uno mismo. No tiene precio y es una de las principales herramientas necesarias para alcanzar una felicidad que de otro modo se hace un pelín más difícil.
Son muchos y muchas las que están valorando someterse a una intervención de este tipo. La verdad es que es una cuestión en la que hay que pensar detenidamente. Pero también resulta lógico pensar que alguien quiere cambiar cualquier cuestión relativa a su cuerpo. Está en su derecho y todas las demás ramas de la medicina y de la psicología así lo aconsejan. No debe haber lugar para el miedo ni para la crítica. Todo sea por el bien de nuestra gente.