A la hora de comprar un producto, sobre todo los que son de un valor más elevado, puede que te ofrezcan la posibilidad de escoger entre financiar la compra o pagar al contado. Si quieres saber qué es más recomendable, has de saber que depende varios factores, entre los que destacan, la liquidez de la que dispongas o las condiciones que te ofrezca la financiera. Para que tengas aún más claro las ventajas e inconvenientes que tiene financiar una compra, te lo vamos a explicar en este artículo con pelos y señales así que, presta mucha atención.
Ventajas de la financiación de compras
Las principales ventajas de poner financiar una compra es que se pueden planificar mejor los gastos, ayuda a construir un patrimonio y se puede comprar algo sin la necesidad de tener todo el dinero.
- Mejor planificación de los gastos
Realizar una inversión poco a poco y no de golpe, puede que te reste el estrés que supone tener que reestructurar, el presupuesto con el que cada persona cuenta mensualmente, a corto o medio plazo.
Es recomendable, anteponerse a esta situación y realizar esa reestructuración con tiempo, de esta manera podrás hacer frente a la financiación a plazos sin ningún problema. Si tienes ahorros, seguro que no tienes complicaciones ningunas.
Además, no sólo planificarás mejor los gastos sino que podrás comprar un producto sin la necesidad de contar con todo el dinero.
- Ayuda para la construcción de un patrimonio
Si tu idea es construir un patrimonio pero la liquidez de tus cuentas es escasa, necesitarás que la financiación cuente con unas condiciones buenas ya que una descapitalización repentina solo te supondrá un disgusto. De hecho, si necesitas mantener un flujo de dinero mensual fijo, esta opción es la mejor. De esta manera, una capacidad de inversión no se verá perjudicada en ningún momento.
- Una buena opción para situaciones de emergencia
En la mayoría de ocasiones es preciso contar con una cantidad elevada de dinero y de forma urgente, por ejemplo para comprar algo de primera necesidad y de uso diario, como podría ser un coche, una nevera, un ordenador para el trabajo… Eso sí, no siempre vas a disponer de la liquidez suficiente como para comprarlo de golpe por lo que, aquí te damos un motivo más para que financies tus compras. Es una herramienta perfecta en estos casos o incluso, puede que la única opción que tengas.
- Existe financiación sin intereses
Estar informado sobre los distintos tipos de financiaciones que existen es básico para acertar en la elección y por ende, para que la financiación se convierta en una ventaja para quien la solicite. Por otro lado, es importante destacar que, por un lado, existen compañías que ofrecen una financiación sin intereses si se llega a una cantidad mínima y otras que, te permiten reducir los plazos y los intereses a medida que se va adelantando algún pago.
“En nuestro caso ofrecemos financiación durante 12 meses sin intereses para poder facilitar el pago a nuestros clientes”, explican desde Replus, empresa especializada en la producción de ventanas y cerramientos de calidad.
Por lo general, la financiación de compras es una herramienta perfecta si se sabe llevar con inteligencia. Al igual que una deuda o inversión de capitales, hay que conocer una buena estrategia y saber cómo planificarla. En el caso opuesto, puedes llegar a verte en situaciones ciertamente desfavorables.
Desventajas de la financiación de compras
Los aspectos más desfavorables de la financiación de una compra puede ser la carga emocional o económica. Es entonces, cuando hay que sentarse y decidir si seguir hacia adelante con la idea de financiar o no, en base a lo que cada uno a nivel personal pueda asumir. Es un momento en el que hay que ser realistas con la situación económica, ya que a pesar de las ventajas que pueda suponer, también es algo que a priori puede parecer una buena idea pero si no se estudia al completo todos los puntos, puede llegar a ser un gran problema económico si no se cuenta con la suficiente liquidez.
Si el producto que necesitas, no es de mucho valor y tienes dinero de sobra, posiblemente te merezca la pena comprarlo al contado. Por ejemplo, para una lavadora o un mueble para el salón, no es recomendable contar con la financiación, a menos que cuente con cero intereses, en ese caso, la elección es personal.
Otras alternativas
Cuando se trata de productos de un valor más superior, como puede ser una casa o un coche, hay que tener en cuenta cuales son los productos permitan desgravaciones fiscales y deducciones de impuestos, de los cuales no te podrás beneficiar si pagar al contado. Por ejemplo, un crédito para una hipoteca o un seguro de ahorro universal. Este te permitirá ahorrar de forma creciente siempre dependiendo de tus posibilidades y de la flexibilidad y liquidez de la que dispongas.
Por todas estas razones, la financiación es una de las mejores opciones si se cuenta con el dinero suficiente para hacer frente al pago a plazos siempre que se estudien todos los puntos a la perfección. Importante también tener en cuenta los puntos negativos, ya que si eres una persona que no tiene mucha liquidez disponible, no es bueno financiar productos muy costosos.